Reseñas destacadas

Competitividad y modelo agrícola europeo.

La investigación agrícola se caracteriza por su alta rentabilidad social, pero a largo plazo; el papel destacado de las instituciones públicas y la lenta velocidad de transferencia tecnológica de la ciencia a la práctica agrícola.

Acceso al documento. García Álvarez-Coque, J.M.

Informe Bijman de Apoyo a las Cooperativas Agrarias.

Encargado y financiado por la DG Agricultura y Desarrollo Rural de la Comisión Europea el proyecto fue gestionado (2011-2012) por el Instituto de investigación en economía agraria LEI Wageningen UR y por la Universidad de Wageningen. Otros socios del consorcio fueron Investigación económica de Pellervo PTT (Finlandia), Universidad de Helsinki, (Finlandia), Instituto de investigación en economía agraria de Grecia, Universidad Justus Liebig, Giessen, (Alemania), Universidad Humboldt de Berlín (Alemania), HIVA, Universidad Católica de Lovaina (Bélgica) y Facultad de Gestión de Rotterdam, Universidad Erasmus ( Países Bajos).

Marco teórico: El punto de partida del estudio es la hipótesis de que los factores principales que determinan la buena marcha de las cooperativas en las cadenas alimentarias tienen que ver con (a) la posición en la cadena de abastecimiento alimentario, (b) la gobernanza interna, y (c) el contexto institucional.

Síntesis de resultados: En todos los Estados miembros, las cooperativas agrarias desempeñan un papel importante a la hora de ayudar a los agricultores a captar una mayor proporción del valor añadido en la cadena de abastecimiento alimentario. Las funciones clave de todas las cooperativas de comercialización son la mejora del poder de negociación de sus socios y la apertura de los socios a las economías de escala. Además, las cooperativas reducen los riesgos de mercado y los costes de transacción, proporcionan acceso a los recursos y refuerzan su posición competitiva mediante la innovación de productos y la garantía de la calidad y seguridad de los alimentos. Un gran número de cooperativas ha ampliado sus actividades a etapas posteriores de la cadena alimentaria, reforzando así su orientación al cliente y al consumidor, gracias a mayores esfuerzos en términos de comercialización (incluyendo las marcas), innovación de productos y adaptación.

Algunas recomendaciones prácticas más destacadas:

  • Los agricultores interesados en crear una organización de productores, una asociación de negociación o una cooperativa deben prestar la suficiente atención a las cuestiones de liderazgo y de capital humano.
  • Una vez que se haya creado la organización, se recomienda a los socios y directores que presten la suficiente atención a la profesionalización. Se aplica también a la gobernanza interna, respecto de la cual los socios del Consejo rector precisan de los conocimientos y las habilidades que se requieren para elegir estrategias adecuadas.
  • A pesar de que son muchos los académicos que hacen hincapié en que las cooperativas, al estar basadas en la auto-organización, deberían desarrollarse de manera independiente, nuestras averiguaciones revelan que un Estado, en tanto que facilitador, puede desempeñar un importante papel para ayudar a los agricultores a desarrollar sus dotes organizativas; sobre todo en los nuevos Estados miembros.

Acceso al documento. Bijman, J. C. Iliopoulos, K.J. Poppe, C. Gijselinckx, K. Hagedorn, M. Hanisch, G.W.J. Hendrikse, R. Kühl, P. Ollila, P. Pyykkönen, y G. van der Sangen (2012). Apoyo a las cooperativas de agricultores; Informe final. Wageningen: Wageningen UR.

La previsible restricción del regadío a escala global intensificará el comercio internacional y ahorrará agua pero no mejorará la seguridad ni la soberanía alimentaria de las zonas más pobres y pobladas.

El índice de Confiabilidad de Suministro de Agua de Riego (IWSR, por sus siglas en inglés) cae de 0,77 en 2000 a 0,69 en 2030, con fuertes reducciones en Asia oriental y meridional. Los cambios regionales van desde -16,3% a +2,4%. Bajo un escenario más sostenible el índice IWSR mundial sólo se reduce a 0,75 en 2030, con descensos mucho menores en las regiones de Asia y una gama de cambios regionales también más estrecha, desde -5,3% a +4,7%. La disponibilidad de riego se mantendrá prácticamente sin cambios en Canadá y Japón, y aumentará ligeramente en los EE.UU., la UE, América Central y Oceanía debido a las inversiones en infraestructuras de riego.

Las mayores reducciones de producción agrícola se predicen para China, India y la región MENA (Asia meridional -excluida la India-, el Medio Oriente y el Norte de África), que teniendo una gran dependencia del regadío, afrontan un estrés significativo y creciente de riego. Pero menos riego no siempre significa que la producción se reduzca. Así en África Subsahariana y Rusia se prevé un aumento de la producción agrícola, a pesar de aumentar la insatisfacción de la demanda de riego. La razón es que el regadío sólo proporciona el 14,3 y el 5,5% de la producción agrícola total respectivamente. A la vista de precios más altos, estas regiones expanden la producción de secano y por lo tanto aumentan la producción global. Pero a escala global, las grandes pérdidas de producción en los países de Asia y la región MENA son mayores que las ganancias en otros lugares, lo que lleva a una reducción de la producción mundial de cultivos, ganado y alimentos procesados.

las regiones ricas en agua tienden a producir más, tanto en regadío como en secano, y no sólo para sustituir las importaciones sino también para ampliar sus exportaciones. Por el contrario, las regiones con escasez de agua tienden a reducir el regadío, ampliando su producción de secano siempre y cuando las precipitaciones sean suficientes. Pero como el secano es menos productivo que el regadío, hacen falta más tierras. Así Liu, J. et al. (2014) predicen la puesta en cultivo de 7,61 millones nuevas hectáreas, actualmente ocupadas por bosques y pastos, fundamentalmente en África subsahariana, India y la región MENA.

La reducción del regadío eleva el coste de la producción agrícola y, como consecuencia, los precios de las materias primas nacionales. Así se predice la subida de los precios en casi todas partes del mundo, pero mucho más en las regiones con mayores restricciones para el riego. Para estas será más atractivo abastecerse de los mercados internacionales y tenderán a reducir sus exportaciones lo que se traducirá en el deterioro de sus balanzas comerciales agroalimentarias así como en el aumento de su dependencia externa con la consiguiente reducción de sus niveles de soberanía alimentaria. Todo ello hará aumentar el volumen del comercio mundial agroalimentario así como el comercio de agua virtual lográndose, muy probablemente, un ahorro global de agua.

Acceso al documento. Fuente: Jing Liu, Thomas W. Hertel, Farzad Taheripour, Tingju Zhu, Claudia Ringler (2014). International trade buffers the impact of future irrigation shortfalls. Global Environmental Change 29 (2014) 22–31 http://dx.doi.org/10.1016/j.gloenvcha.2014.07.010 Intensificación sostenible de la agricultura fortaleciendo el Segundo Pilar de la PAC.

En principio, la tesis dominante es la de que en el futuro faltarán alimentos, a menos que se adopten medidas que contribuyan a aumentar la producción mundial de estos a un ritmo mayor que el de la última década.  En cualquier caso, el mundo vive en la actualidad una situación de ajuste tan estrecho entre demanda y oferta mundial de alimentos, que genera   una enorme volatilidad de los mercados agrarios.

Ante esta situación, la PAC debería favorecer una intensificación sostenible de la agricultura que permita aumentar la producción de alimentos y al mismo tiempo garantizar la sostenibilidad ambiental y la mitigación del cambio climático. Y la mejor forma de hacerlo es potenciando las medidas del segundo pilar.

Pero, ante situaciones tan volátiles e inciertas en los mercados agrarios internacionales, la futura PAC debería introducir en su primer pilar algún mecanismo de flexibilidad de los pagos básicos y nuevos tipos de ayudas de mercado adaptadas a la situación cambiante y de fuerte volatilidad de los mercados, que complementarían los instrumentos de gestión del riesgo de mercado incluidos en el segundo pilar de la PAC (2014-2020).

Fuente: José Mª Sumpsi (2014). La crisis mundial de alimentos y el futuro de la PAC. En Reflexiones sobre la PAC (Bardají, I., coord), págs. 279-295. CAJAMAR, 2014. Informe de la FAO sobre la inseguridad alimentaria mundial 2014.

El informe anual de la FAO indica que continua la tendencia en la reducción global del hambre. Los 805 millones de personas que sufren subnutrición crónica (2012-14), supone una reducción de más de 100 millones en la última década y de 209 millones desde 1990-92. Sin embargo, aproximadamente uno de cada nueve personas en el mundo todavía carece de alimentos insuficientes para una vida activa y saludable. La gran mayoría de estas personas desnutridas viven en países en desarrollo, donde se calcula que 791 millones sufrieron hambre crónico en 2012-14. Una de cada ocho personas del mundo en desarrollo sufre desnutrición crónica. Por tanto, todavía se requieren esfuerzos considerables para llegar a la meta del Desarrollo del Milenio fijada para 2015.

Ver informe completo Importancia económica del sistema agroalimentario español.

El sector agrario, la industria agroalimentaria y las actividades intrínsecamente ligadas a ellas en los ámbitos industriales, de servicios, transporte, almacenamiento y distribución configuran un sistema agroalimentario, cuyo peso en la economía española es muy superior al que se deduce de la cuantificación estricta del Valor Añadido Bruto generado por el sector agrario y por la industria agroalimentaria. Así, el Sistema Agroalimentario supondría alrededor del 8,4 % del Valor Añadido Bruto (VAB) total de la economía española y estaría generando unos 2,3 millones de empleos. Por fases, la generación de VAB del sistema se distribuiría porcentualmente en: industria de insumos y servicios (9,7%), rama agraria (23,9%), industria agroalimentaria (25,1%), servicios de transporte (9,7%) y distribución comercial (31,5%).

Acceso al documento Fuente: MAGRAMA. “La contribución del sistema agroalimentario a la economía española: una propuesta metodológica” Análisis y Prospectiva – Serie AgrInfo nº 23. Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. NIPO: 280-13-181-2. Indicadores de la agricultura, la alimentación y el medio ambiente en España.

La esencia de la serie Indicadores que publica regularmente la Subsecretaría del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medioambiente, es proporcionar información, análisis y datos estadísticos. En este Informe se integran y relacionan entre sí, de manera que contribuyan a ilustrar la interdependencia entre crecimiento económico, creación de empleo y protección del medio ambiente. Conforme a esta nueva estructura de contenidos, el Informe 2013 describe en primer lugar el entorno físico y territorial, como fuente de recursos y receptor de impactos, y soporte de las actividades económicas y de nuestra propia vida; a continuación, se presenta una caracterización socioeconómica de esas actividades, describiendo los sectores productivos de interés en el ámbito del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medioambiente; y por último, como motor significativo de estas actividades sectoriales, se estudia el destino de las producciones mediante un análisis de los mercados interiores y exteriores, sus índices de precios y tendencias.

Acceso al documento Fuente: MAGRAMA (2014). Informe Anual de Indicadores: Agricultura, Alimentacióny Medio Ambiente 2013. Nº extraordinario de la revista Análisis y Prospectiva. Serie Indicadores. Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. Mayo, 2014. Ensayo de coexistencia entre maíz transgénico y convencional en Taiwán.

Una variedad de maíz con granos púrpuras (Perla Negra) simuló al donante de polen genéticamente modificado (GM), y otra con granos blancos (Perla Blanca) simuló al receptor no transgénico. Los campos fuente fueron rodeados por los receptores durante dos cosechas. En la primera cosecha, la superficie total fue de 1.5 ha y la relación fuente/receptor de 1:32; en la segunda cosecha, la superficie total fue de 1.83 ha y la relación de 1:17,3. Los resultados muestran que es posible evitar la polinización cruzada aplicando las distancias de aislamiento apropiadas.

Fuente: Kuo, B. , Nieh, S. , Shieh, G. and Lin, W. (2014) Simulating the Gene Flow of Genetically Modified Maize in Taiwan. Agricultural Sciences5, 440-453. doi: 10.4236/as.2014.55045. Revolución Verde y Cambio Climático en África Oriental. Considerando la tecnología disponible, la producción potencial del cultivo de arroz sin riego en Uganda es de 3 t·ha-1, lo que podría considerarse «revolucionariamente» elevado. Sin embargo, una reducción de la lluvia del 10-20 % durante las primeras etapas del cultivo podría anular este beneficio revolucionario.

Se pone de manifiesto la necesidad de aumentar las capacidades de investigación y de extensión para que la Revolución Verde pueda hacerse realidad en África Oriental, donde  el cultivo del arroz sin riego puede resultar determinante para  la mejora drástica de la seguridad alimentaria, que es una necesidad urgente en la región. El empeoramiento de condiciones climáticas, si ocurren, hace estas necesidades todavía más imperativas.

Fuente: Maruyama, A. , Haneishi, Y. , Okello, S. , Asea, G. , Tsuboi, T. , Takagaki, M. and Kikuchi, M. (2014). Rice Green Revolution and Climatic Change in East Africa: An Approach from the Technical Efficiency of Rainfed Rice Farmers in Uganda. Agricultural Sciences5, 330-341. doi: 10.4236/as.2014.54035.

Tendencia e incertidumbres de la PAC tras el cierre de la Reforma de 2013.

Albert Massot tras analizar los factores institucionales clave que, en el marco del sistema decisorio multinivel de la UE surgido tras el Tratado de Lisboa, han operado en la reciente Reforma de la PAC en la que, a precios constantes, el presupuesto total de esta política entre los ejercicios 2013 y 2020 se habrá reducido un 14,1% (13,0 % en el Pilar 1 y 17,8% en el Pilar 2). Señala que en 2020 habrá que valorar el resultado global de la Reforma ahora llevada a cabo así como la operatividad de los ejes abiertos en el nuevo marco legislativo ahora aprobado, a saber:

  • Primacía presupuestaria de los pagos directos frente a la medidas de mercado y de desarrollo rural.
  • Extensión de la cofinanciación a los pagos directos (una vez que el Tratado de Lisboa desclasifica la política de mercados como competencia exclusiva de la UE tal y como establecía la jurisprudencia y la propia Comisión Europea) y establecimiento de un único Pilar agro-rural.
  • Papel de la «Reserva de crisis» como principal fuente de financiación de la futura política de mercados, complementada por los mecanismos de gestión individual del riesgo.
  • Multifuncionalización de los pagos directos ampliado en apoyo a nuevos bienes públicos o convirtiendo los pagos redistributivos en obligatorios.
  • Eliminación definitiva de los pagos acoplados a la producción.
  • Implantación de un Pago único a la renta por hectárea y por grandes sistemas agronómicos europeos.
  • Reforzamiento de la selectividad de los beneficiarios de los pagos directos con la consiguiente revisión de las definiciones de «Agricultor Activo» y «Agricultor Profesional»
  • Mayor capacidad de gestión de las autoridades nacionales.
  • Reforzamiento de las medidas orientadas a la vertebración interprofesional, la contractualización sectorial y la regulación de la competencia en materia agraria.
  • El perfil de la «Agricultura del Conocimiento» en la UE y las modalidades de apoyo a la investigación y la trasferencia tecnológica.
  • Grado de coordinación de la política de desarrollo rural respecto de la política de cohesión y grado de integración del FEADER con el resto de los Fondos Estructurales.
  • Resultados del cierre de la Ronda de Doha de la OMC.
  • Resultados y evolución de la Farm Bill estadounidense (Agriculture Reform, Food and Jobs Act de 2014).

Fuente: Albert Massot Martí (2013). Factores Institucionales en la Reforma de la PAC 2020. Revista Española de Estudios Agrosociales y Pesqueros, n.º 236, 2013 (119-169).

http://www.magrama.gob.es/es/ministerio/servicios/publicaciones/ART%C3%8DCULO_1649_tcm7-317849.pdf

Ver  también Albert Massot Martí (2012). Los mecanismos de la PAC 2020: principales vectores de lproceso de reforma en curso.  Revista Española de Estudios Agrosociales y Pesqueros, nº 232, 2012 (13-67).

http://www.magrama.gob.es/ministerio/pags/Biblioteca/Revistas/pdf_REEAP%2Fr232_13_68.pdf

Cultivo intensivo de arroz en Tanzania y ahorro de agua.

Con un marco de plantación de 25×25 cm, el rendimiento del Sistema Intensivo de Arroz (SRI) produjo en la zona de Mkindo (Tanzania) 9,90 tn/ha con un uso de agua de 1.026 m3/m2 frente a las 3,83 tn/ha del sistema tradicional y 2.882 m3 agua/m2. Fuente: Zacharia Katambara, Frederick C. Kahimba, Henry F. Mahoo, Winfred B. Mbungu, Fikiri Mhenga, Paul Reuben, Muyenjwa Maugo, Anthony Nyarubamba. Adopting the system of rice intensification (SRI) in Tanzania: A review. Vol.4, No.8, 369-375 (2013) Agricultural Sciences http://dx.doi.org/10.4236/as.2013.48053 Las ventajas agronómicas y ambientales del mínimo laboreo en Rumanía.

La conservación del suelo debe contemplarse más allá de la erosión estando condicionada por la gestión del carbono.  El laboreo mínimo representa una alternativa al laboreo convencional y este estudio demuestra que aumenta el contenido en materia orgánica del suelo y mejora su estado de agregación, la permeabilidad así como la fertilidad reduciendo  también la erosión y asegura mayores reservas de agua en los diferentes tipos de suelo.

Fuente: Teodor Rusu, Ioan Pacurar, Marcel Dirja, Horea Mihai Pacurar, Ioan Oroian, Smaranda Adina Cosma, Marinela Gheres (2013). Effect of tillage systems on soil properties, humus and water conservation. Agricultural Sciences. Vol.4, No.5B, 35-40 (2013). La agricultura ecológica produce menos que la convencional.

La agricultura ecológica se propone como solución para la producción de alimentos minimizando el daño a los ecosistemas. Sin embargo, los críticos argumentan que este tipo de agricultura tendría menores rendimientos y, por tanto, necesitaría más tierra que para producir lo mismo que la agricultura convencional lo que se traduciría, a su vez, en mayores niveles de deforestación y pérdida de biodiversidad. Mediante meta-análisis se examinan los rendimientos globales de los dos tipos de agricultura  encontrándose que el rendimiento medio de la ecológica es un 25% más bajo que el de la convencional.

Fuente: Verena Seufert, Navin Ramankutty & Jonathan A. Foley (2012). Comparing the yields of organic and conventional agriculture. Nature, 10-May-2012; Vol. 485, 229-234 pp. La orientación ambientalista de la PAC no garantiza su legitimidad. 

La existencia de una demanda a favor de una agricultura multifuncional, por sí sola, no justificaría la existencia de un régimen de apoyo (subvenciones) al sector, que estaría justificado socialmente sólo en la medida que éste contribuya favorablemente al bienestar del conjunto de la sociedad que lo soporta. Teniendo en cuenta esta consideración general, cabría hacer un juicio crítico sobre las propuestas de cambio de la PAC a partir de 2013 ya presentadas por la Comisión, que defienden la remuneración de la actividad agraria casi exclusivamente por la provisión de bienes públicos de tipo ambiental.

Los resultados de la investigación realizada ponen de manifiesto cómo este giro de la política agraria no respondería plenamente a las preferencias de los ciudadanos andaluces, que estarían a favor de los nuevos instrumentos políticos que mejoren la provisión de bienes ambientales (y sociales), pero no defenderían un tipo de apoyo público al sector agrario que estuviera totalmente desligado de su nivel productivo. Las funciones económicas tienen un respaldo muy importante por parte de la sociedad andaluza (peso agregado del 59%) mientras que las funciones ambientales y sociales tendrían un respaldo menor (27% y 14% respectivamente).

Fuente: M. Arriaza y J.A. Gómez-Limón. Valoración social del carácter multifuncional de la agricultura andaluza. ITEA (2011), Vol. 107 (2), 102-125 pp. El uso y la gestión del suelo es relevante para el efecto invernadero.

El incremento de la la concentración atmosférica de CO2 en un 31% desde 1750 como consecuencia del uso de combustibles fósiles y de los cambios en los usos del suelo exige estrategias para mitigar el calentamiento global. Desde la Revolución Industrial las emisiones de Carbono debidas a los combustibles fósiles se estiman en 270 (+/-30) Pg mientras que las debidas a los cambios en los usos del suelo (conversión de ecosistemas naturales en sistemas agrícolas, drenaje de humedales, cultivo del seulo, deforestación y quema de biomasa) se estima en 136 (+/- 55) Pg (1 Petagramo =  1 billion ton). Por tanto, los cambios en los usos del suelo justifican el 33,49 % del aumento del nivel de CO2 atmosférico.

Algunos suelos cultivados han perdido entre la mitad y una tercera parte del contenido original en Carbono orgánico del suelo (SOC) con una pérdida acumulada de 30-40 Mg de Carbono por hectárea (1 Megagramo = 1 ton). Las pérdidas de SOC han contribuido con 78 (+/- 12) Pg de C a la atmósfera.

La adopción de prácticas de gestión y uso del suelo agrícola adecuadas puede contribuir de forma significativa a reducir la tasa de aumento de CO2 atmosférico teniendo, a su vez, impactos favorables sobre la seguridad alimentaria, la agroindustria, la calidad del agua y el medio ambiente. Los niveles de secuestro de C mediante la adopción de tales prácticas puede ser de 50 a 1000 kg/ha.año, con un potencial de 0,9 (+/-0,3) Pg C/año, que equivale a una cantidad equivalente entre una tercera y una cuarta parte del incremento anual de CO2 atmosférico (3,3 Pg C/año). El potencial de acumulación de secuestro de C en 25-50 años es de 30-60 Pg.

Fuente: R. All (2004) . Soil carbon sequestration to mitigate climate change. Geoderma 123 (2004) 1–22 El compromiso ideológico de la sociedad con la agricultura justificaría su apoyo público.

¿Cómo es posible que las decisiones políticas en las sociedades democráticas económicamente avanzadas favorezcan a una población agrícola minoritaria mediante medidas proteccionistas?¿Cómo se explica esta posición privilegiada dela agricultura en las democracias parlamentarias? ¿Por qué siendo social y económicamente minoritarios los agricultores tienen más éxito que otros grupos en la «caza de rentas»? ¿Cómo se explica la existencia de las Administraciones Agrarias? ¿Cuál es el proceso de legitimación pública de los intereses agrícolas por el conjunto social?

La política agraria es el resultado del proceso político de toma de decisiones enmarcadas por el escenario institucional existente que transforma, guía y conforma las preferencias políticas de las poblaciones en las democracias parlamentarias. Por tanto, es necesario mejorar el diseño institucional para que las decisiones políticas sean más adecuadas y coherentes con los desafíos mundiales.

En el marco del bienestar social y delos países desarrollados, sería de esperar que las preferencias económicas de la mayoría de los votantes condujeran a decisiones desfavorables a la agricultura. Sin embargo ocurre justo lo contrario. Ello se debe al compromiso ideológico de la sociedad con la agricultura, reforzado y acelerado por grupos de interés y burocracias favorables a la agricultura. La naturaleza del compromiso sería esencialmente altruista si bien la disparidad de rentas agrarias frente a las del resto de la población jugaría un papel relevante.

Fuente: Gunther Schmitt (1986). El papel de las instituciones en la formulación de la política agraria. Agricultura y Sociedad, Vol. 38-39, 1986.

Espacio Rural, Agricultura y Medio Ambiente.

Reflexión realizada  en 2003, publicada en la Revista de Estudios Agrosociales, sobre el futuro de la agricultura en función del papel económico social y ambiental que debe desempeñar.

Publicado por J. Olona en la Revista de Estudios Agrosociales, nº 163 (Enero-marzo, 1993)

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